Casi todos los días, PETA recibe reportes acerca de operaciones de “rescate” y “santuarios” que dicen salvar animales de la eutanasia, pero que en su lugar los descuidan gravemente, algunas veces hasta la muerte. Una y otra vez, PETA ha puesto al descubierto casos en los que los impostores de rescates como Caboodle Ranch y Angel’s Gate se aprovechan de personas bien intencionadas que de hecho nunca han visitado las instalaciones y no tienen idea de lo que están financiando.

Esta vez, PETA ha documentado que en Darlynn’s Darlins Rescue Ranch, Inc. (DDRR), en las afueras de Polk City, en Florida, a los cerdos no se les dio nada para comer hasta por cinco días, y, después, cuando los alimentaron, a menudo no les dieron más que residuos de comida podrida y pan con moho. A los animales enfermos, heridos y moribundos se les negó el cuidado veterinario. A los perros desnutridos que mantenían confinados en perreras afuera se les privó de agua cuando la temperatura se acercaba a los 100 grados Fahrenheit (38 grados centígrados). Y la lista continúa.

Basados en la evidencia de PETA del descuido sistemático y el sufrimiento innecesario en las instalaciones, la Oficina del Sheriff del Condado de Polk (PCSO por sus siglas en inglés) ejecutó una orden el 4 de agosto del 2016 e incautó casi 200 animales, rescatándolos de la miseria. El 8 de agosto del 2016, las autoridades acusaron a los operadores del DDRR, Darlynn Czerner y Clinton Martin, con un total de 282 cargos de crueldad hacia los animales, incluyendo seis crímenes. El 6 de septiembre de 2016, un juez otorgó la custodia de 193 animales a la oficina del Sheriff del Condado de Polk. El 9 de marzo de 2018, Martin se declaró culpable de un delito menor de crueldad imputado y fue sentenciado a más de seis meses tras las rejas que cumplió tras su detención. Czerner, quien pasó más de tres meses en la cárcel, firmó un contrato el 12 de marzo de 2018, acordando entrar al programa de intervención previa a juicio ante la Oficina del Fiscal del Estado, y debe someterse a una evaluación de salud mental, tratamiento y pagar los costos. Martin y Czerner les prohibieron poseer animales.

Spunky y Buddy

Spunky estaba demacrado, cubierto de llagas y sin poder usar sus patas traseras. Lo dejaron languidecer así durante meses. Cuando la lesión más grande que tenía en su espalda, entre muchas otras, creció hasta el tamaño de una naranja y tenía abscesos, Czerner y Martin pasaron una hora cortando su espalda y extrayendo pus y sangre sin anestesia, mientras él gritaba y luchaba por escapar.

En las semanas que siguieron, Czerner exprimió el absceso de nuevo varias veces arrancando grandes tiras de piel de la espalda de Spunky y admitiendo mientras éste gritaba que “por supuesto” eso le causaba dolor.

Spunky pasó varios días encerrado con Buddy, un cerdo apático y demacrado que Czerner dijo que llevaría al veterinario a principios de junio. Pero pasó tiempo y no lo hizo. A Buddy lo dejaron permanecer acostado sobre un lado, pues tan solo pararse era difícil para él. Según Martin, después de sufrir por “más de dos semanas”, a Buddy lo encontraron muerto. Spunky estaba al lado de Buddy el último día de su vida miserable.

Cerdos famélicos privados de cuidados básicos

Martin les negó de manera rutinaria alimento a los cerdos hasta por cinco días (a pesar de que le tomaba solamente alrededor de 30 minutos alimentarlos) y rechazó varias ofertas de ayudar a alimentar a los animales. Cuando finalmente los alimentaban, algunos recibían residuos de comida –la mayoría podridos– o pan que a menudo estaba enmohecido. Pero se les negó el heno y solo muy rara vez les daban alimentos granulados.

Cuando se les proporcionaba comida, los cerdos más pequeños y menos agresivos no podían acceder a ésta puesto que los cerdos más grandes dominaban los pocos abrevaderos disponibles. Las vértebras, la cadera y otros huesos de muchos cerdos demacrados sobresalían prominentemente por debajo de su piel.

A pesar de que las pezuñas de algunos cerdos crecieron enroscadas y los colmillos de otros rozaban contra sus caras por estar demasiado largos, no se les proporcionó ningún cuidado dental ni para sus pezuñas –los cuales son importantes para la salud de los cerdos- durante la investigación de PETA.

Con una dieta tan deficiente en términos de nutrición y la falta de cuidados básicos, los animales no tenían ninguna posibilidad.

Un novillo demacrado, gallinas y perros desesperadamente sedientos, y gatos moribundos

Mientras que el índice de calor llegaba a los 100 grados Fahrenheit (38 grados centígrados) en el verano de la Florida, Isis, el novillo demacrado de la pareja, fue encontrado en repetidas ocasiones sin agua. A menudo tenía muy poco para comer, aparte de un escaso puñado de heno sobre el suelo, a pesar de peticiones por parte del testigo de PETA de darle más comida.

Se encontraron aproximadamente a 40 gallinas y gallos sin agua, una y otra vez. Cuando un testigo de PETA les proporcionó agua, las gallinas rutinariamente bebieron por casi 10 minutos.

Se encontró repetidamente a perros delgados sin agua y bebieron vorazmente cuando se la proporcionaron. Después de una pelea de perros en la propiedad, Martin simplemente ofreció dispararle al perro al que le dejaron una pata herida y sangrando. No se le proporcionó ningún cuidado veterinario.

Después de que Princess, una gata letárgica y no responsiva convulsionó y murió, Czerner admitió que tenía tantos animales que simplemente no podía cuidarlos a todos (ella también mantenía a varios cerdos en su baño y una jaula en su casa). Incluso admitió que temía ser encarcelada por negligencia.

¡Tú puedes ayudar a detener esta crueldad!

La Oficina del Abogado del Estado del 10mo. Circuito Judicial se ha unido a la PCSO al actuar rápida y fuertemente en este caso. Por favor agradécele al Abogado del Estado, Jerry Hill, por su apoyo a los esfuerzos de la PCSO y hazle saber que apoyas fuertemente el proceso judicial de este caso.

Asegúrate de no estar financiando ni apoyando a un infierno de “muerte lenta” para los animales. En su lugar, apoya únicamente a los refugios, manejados por profesionales, de admisiones abiertas, los cuales les proporcionan a los animales cuidado veterinario y, cuando es necesario, un final digno y sin dolor, en lugar de acumularlos ni dejarlos sufrir hasta que mueren por sí mismos, en condiciones miserables.

¡Firma aquí para apoyar el procesamiento en este caso!

Yo, el abajo firmante, le agradezco por apoyar a la Oficina del Sheriff del Condado de Polk en su rápida acción para incautar a casi 200 animales de Darlynn’s Darlins Rescue Ranch, Inc.

Este caso es muy importante para mí. Tiene todo mi apoyo para procesar este asunto con todo el conocimiento y los recursos que su oficina pueda utilizar. Espero que, tras cualquier condena en este caso, su oficina le pedirá a la corte que se asegure de que ningún otro animal caiga nunca en las manos de los sospechosos.

Gracias por su tiempo y su consideración.