Las vacas son animales inteligentes, sensibles, que sienten el dolor del mismo modo en que lo sienten los perros o los gatos. Ellas tienen relaciones interpersonales complejas y se emocionan cuando cumplen una meta. También lloran la muerte de sus seres queridos, y prefieren dormir cerca de sus familiares.
Pero aquellas vacas que son utilizadas por la industria de la piel, sobrellevan un sinfín de crueldades inimaginables durante sus cortas vidas.
1.- Las vacas son mutiladas con métodos similares a las torturas medievales.
Comúnmente, son castradas, descornadas y marcadas con hierros ardientes. Sus colas y cuernos son mutilados –sin usar ningún medicamento contra el dolor. Este abuso empieza cuando aún son muy jóvenes.
Poco después de nacer, los trabajadores las separan de sus madres, a rastras, antes de ser sometidas al suelo para perforarles las orejas. Un exposé de PETA, muestra a los trabajadores de ranchos ganaderos en Brasil, marcando la cara de los becerros con hierros ardientes, mientras las sostienen pisándoles la cara contra el suelo.
Los trabajadores fueron grabados, también, electrocutando a las vacas y golpeando y pinchándolas con fustas de metal. La sobrepoblación y hacinamiento, causa que los animales entren en pánico y tropiecen unas sobre otras, mientras los trabajadores las jalonean por las orejas y la cola.
2.- Los becerros son arrebatados de sus madres …si es que sobreviven.
Sin intervención humana, los becerros se amamantan durante casi un año. Pero la separación prematura de sus madres es una práctica común en este tipo de granjas, alrededor del mundo.
Inclusive los becerros que aún no han nacido –y cuya piel se considera un material “de lujo”– son mutilados para hacer cuero. Algunos son abortados de manera intencional, mientras que otros son extraídos cortando el cuerpo de sus madres embarazadas.
3.- Cuando las vacas se encuentran al borde del colapso, sus colas son fracturadas –de manera intencional– y se les unta tabaco o chile en los ojos para forzarlas a seguir caminando.
[peta-gif gif_id=”2322″ width=”600″]
Mucha de la piel a la venta en los Estados Unidos, es importada de India, en donde las vacas son forzadas a recorrer cientos de millas en el polvoriento calor, para llegar al matadero, sin agua ni comida. Aquellas que son transportadas en camión desde India hasta Bangladesh, son amarradas con cuerdas, y los vehículos están tan sobrecargados que los animales no pueden siquiera moverse. Llegan a su destino famélicas, exhaustas y tan desnutridas que no pueden ni mantenerse en pie. Muchas sostienen fracturas en los huesos y sufren de infecciones oculares y heridas expuestas.
Inclusive si un material dice “Hecho en Italia” o “Hecho en Estados Unidos”, la materia prima, pudo haber venido de India o China (en donde las condiciones no son mucho mejores).
4.- A las vacas no les queda más, que observar, mientras los trabajadores asesinan a su familia y amigos.
En India, los trabajadores de los mataderos, lanzan a las vacas al suelo, les amarran las piernas y les cortan la garganta –todo en la presencia de las demás vacas. Como el exposé de PETA sobre la billonaria industria peletera de Bangladesh muestra en video, algunas vacas siguen aún con vida y patean mientras son desolladas.
5.- En promedio, las vacas son asesinadas entre 1 y 5 años de edad, tan solo una fracción de su esperanza de vida natural.
Las vacas de estas granjas son sacrificadas mucho antes de sus casi 20 años de esperanza de vida natural. En mataderos de E.E.U.U., se les dispara en la cabeza con una pistola de electroshock. Mientras están colgadas de cabeza por las patas traseras, se les cercena la garganta y se desangran hasta morir. Muchos animales no están suficientemente aturdidos y se les desmiembra mientras permanecen conscientes.
6.- Las pieles son preservadas con químicos tóxicos.
Sin tamizar, los zapatos de piel se pudrirían sobre tus pies. La piel animal es procesada con varias sustancias químicas dañinas, como lo son las sales minerales, formaldehído, alquitrán de hulla y derivados, varios aceites, colorantes, y acabados –algunos a base de cianuro.
La mayoría de las pieles son tamizadas con sulfato de cromo. Todos los desechos del cromo son considerados tóxicos por la agencia de protección ambiental de E.E.U.U. (U.S. Environmental Protection Agency). Los centros de prevención de control de enfermedades encontraron que el índice de leucemia en los residentes de las cercanías a las curtidurías de Kentucky, era cinco veces más alto que el promedio general de E.E.U.U. Los estudios hechos en trabajadores del tamiz de pieles en Suecia e Italia encontraron que el riesgo de cáncer es “entre 20% y 50% mayor” que el promedio general.
7.- Cada año, más de mil millones de animales son asesinados por su carne y su piel.
La piel es el producto secundario de más valor en la industria de la carne, lo cual significa que contribuye directamente a los horrores que suceden en las granjas industriales y mataderos donde mueren incontables cantidades de animales cada año.
La crueldad es una elección
Todos elegimos entre apoyar el trato ético, o la crueldad, al comprar una chaqueta o un par de zapatos. Viste de materiales veganos todos los días y ayuda a detener a la industria global de piel.