Defensores de los animales interrumpen la oración de la noche del papa con este mensaje por los toros

Manifestantes de PETA U.K. vistiendo camisetas que decían, “Basta de bendecir las corridas de toros” interrumpieron un servicio de oración en la Basílica de San Pablo Extramuros en Roma, al que asistió el papa Francisco, suplicándole a Su Santidad que corte los lazos de la Iglesia católica con las corridas de toros y condene el despreciable deporte sangriento.

“La Biblia nos pide que mostremos misericordia a todas las creaciones de Dios, sin embargo, los toros están siendo atormentados, apuñalados y asesinados frente a multitudes burlonas por aquellos bendecidos por sacerdotes católicos”, dice Mimi Bekhechi, vicepresidenta de PETA para el Reino Unido y Europa. “PETA le pide al papa Francisco que condene la vil industria taurina y corte los lazos de la iglesia con estos espectáculos sangrientos y despiadados”.

Cada año, decenas de miles de toros son atormentados y asesinados en festivales taurinos en todo el mundo, muchos de los cuales se celebran en honor a santos católicos. Durante estos eventos, hombres a caballo clavan lanzas en la espalda y el cuello de un toro antes de que otros le hundan banderillas en la espalda, infligiendo un dolor agudo cada vez que gira la cabeza y afectando su rango de movimiento. Eventualmente, cuando el toro se debilita por la pérdida de sangre, aparece un matador e intenta matar al toro hundiéndole una espada en los pulmones o, si eso falla, cortándole la médula espinal con un cuchillo. El toro puede estar paralizado, pero aún consciente mientras el matador le corta las orejas o la cola como trofeo y su cuerpo es arrastrado fuera de la arena.

El papa Francisco escribió en su encíclica Laudato Si‘ que “todo acto de crueldad hacia cualquier criatura es ‘contrario a la dignidad humana’”, y ya en el siglo XVI, el Papa Pío V, que ha sido canonizado, prohibió las corridas de toros, las cuales describió como “espectáculos crueles y viles del diablo y no del hombre” alejados de la “piedad y caridad cristiana”. La prohibición impide a los sacerdotes y otros clérigos asistir a las corridas de toros y desaprueba que estos eventos se realicen en días festivos religiosos. Sin embargo, la Iglesia no está respetando la prohibición, y los sacerdotes católicos a menudo ofician ceremonias religiosas en las plazas de toros y asisten a los toreros en las capillas de las arenas. Algunos hasta atacan a los toros en las arenas vestidos con sotana.

Pídele al papa Francisco que condene la tortura de toros

Por favor, firma la petición al papa Francisco, líder de la Iglesia católica romana, pidiéndole que denuncie la crueldad de los espectáculos de corridas de toros en nombre de la Iglesia.