La osa polar Szenja muere de tristeza y en soledad, sospecha PETA

ACTUALIZACIÓN: A menos de 3 meses de que PETA instara a SeaWorld, en vano, a no separar a los osos polares Szenja y Snowflake, uno de los dos osos murió. Szenja, la osa que se quedó sola en el parque de SeaWorld en San Diego, murió de tristeza, sospecha PETA.

Tras perder a su compañero de 20 años cuando SeaWorld se llevó a Snowflake al zoológico de Pittsburgh para criar más osos polares infelices, Szenja hizo lo que haría cualquiera cuando pierde la esperanza; se rindió. Que esto sirva de escarmiento a SeaWorld: Dejen de criar y transportar animales por todo el mundo, cierren sus exposiciones de animales y retírenlos a santuarios. Hasta que no suceda esto, el barco se seguirá hundiendo.

Publicado originalmente el 3 de Febrero de 2017

Un preocupado experto en mamíferos marinos, contactó a PETA para alertarnos sobre el plan de SeaWorld de separar a los dos osos polares del parque de San Diego; Snowflake y Szenja, quienes son mejores amigos. SeaWorld quiere enviar a Snowflake al zoológico de Pittsburgh para reproducirla con propósitos comerciales. Esto dejaría a Szenja, quien ha vivido con Snowflake desde 1997, sin ninguna compañía con seres de su especie. Y, por supuesto, cualquier oso polar bebé que resultara nacer, sería condenado a la misma existencia miserable de vivir enclaustrado en un espacio de una millonésima parte del tamaño de su hábitat natural. PETA envió una carta urgente al director ejecutivo de SeaWorld, Joel Manby, instándolo a detener la separación de los animales y sus intenciones de criar más.

Algunas fuentes han dicho a PETA que SeaWorld necesita, desesperadamente, un oso polar bebé para mostrar al público. Se reporta que el parque de San Diego tiene dificultades para conseguir osos bebés ya que ni Canadá ni Alaska le quieren dar osos huérfanos. La empresa presuntamente, no está a la altura de los estándares mínimos prescritos por las leyes internacionales de conservación de los osos polares. SeaWorls ha intentado embarazar a Snowflake en varias ocasiones, incluyendo el incidente en que en el 2015 fue drogada e inseminada a la fuerza.

SeaWorld intenta esconder su verdadera intención (tener un bebé en el parque para atraer a más visitantes) bajo su manga, con el pretexto de “conservar la especie”. Aunque el bebé de Snowflake sobreviviera—lo cual es muy poco probable dado que el porcentaje de mortandad infantil en osos polares cautivos es de 65%— él, o ella, jamás sería liberado en su hábitat natural. La conservación de una especie se trata de preservar hábitats naturales y proteger especies en la naturaleza, no de criar más animales para que vivan en una caja de concreto.

Mientras tanto, el zoológico de Pittsburgh, perdió su acreditación de la Asociación de Zoológicos y Acuarios (Association of Zoos and Aquariums) en el 2015 puesto que se negó a cumplir con los requerimientos de la asociación para el cuidado óptimo de elefantes. Y en noviembre de 2016, fue citado por no cumplir con la ley federal de bienestar animal, cuando el confín de sus murciélagos se inundó, matando a 36 murciélagos.

PETA continuará luchando para que SeaWorld no agregue más sufrimiento a las miserables vidas de estos osos polares y para que no siga adelante con su enfermo plan y no condene a más animales a vivir la misma triste existencia.