Es oficial: La Ciudad de México ha prohibido los delfinarios

Es oficial: La Ciudad de México ha prohibido los delfinarios (también conocidos como cárceles acuáticas para delfines).

Los dolfinarios (entre ellos Dolphin Discovery en Six Flags México) deberán reubicar a los delfines que mantenían en cautiverio, dentro de un periodo de seis meses. La noticia llega como consecuencia de la decisión tomada el año pasado por la Ciudad de México, de prohibir todos los espectáculos con delfines, así como los crueles programas de “nado con delfines”.

Las autoridades de mentalidad moderna de la capital de México prohibieron también los circos con animales en el 2014, y el país entero siguió por el mismo camino, prohibiéndolos poco después. La Ciudad de México es un ejemplo para las autoridades y legisladores de EE.UU., y muchos otros lugares, deberían seguir su ejemplo.

Los delfines pertenecen en la naturaleza, NO en prisiones rellenas de cloro

Las orcas y delfines viven en grupos sociales grandes y complejos, y nadan distancias enormes en el mar abierto todos los días. En cautiverio, estos animales solo pueden nadar en círculos interminables en tanques que son para ellos, el equivalente a nadar en una tina de baño. Se les niega la oportunidad de casi todos los comportamientos naturales que tendrían en su hábitat natural. Se les fuerza a actuar y hacer trucos sin sentido y a menudo son arrancados de sus familiares cuando son trasladados de parque en parque. Muchos animales mueren mucho antes de su expectativa natural de vida.

Afortunadamente, los gobiernos de todo el mundo están aceptando que los delfines, orcas y demás cetáceos, no pertenecen en tanques. Chile, Costa Rica y Croacia han prohibido el cautiverio de cetáceos. En 2016, el Acuario Nacional de Baltimore declaró que está progresando y compartió sus planes de enviar a ocho delfines nariz de botella a santuarios. Al inicio de este año, el acuario de Vancouver anunció que ya no mantendrá a ballenas y delfines en cautiverio.

SeaWorld debe vaciar sus tanques

Mientras que acuarios y parques marinos, así como ciudades y hasta países enteros de todo el mundo, se están uniendo a esta mentalidad progresista, SeaWorld continúa encarcelando animales, privándolos de libertad de movimiento, prohibiéndoles la oportunidad de establecer su territorio natural y explorarlo, de reproducirse y formar grupos naturalmente (y no artificialmente sucede ahí), atestiguando cómo se vuelven locos por la frustración y soledad.

Debemos instar a los parques de indiversiones a que se unan a la Ciudad de México y abran sus tanques para liberar a los animales en santuarios costeros (en donde podrían habitar enormes áreas de océano mientras se benefician de ciudados humanos durante el tiempo necesario) para que puedan tener una vida con la mayor semblanza a la naturaleza, fuera de la prisión de los tanques.

Pídele a SeaWorld que vacíe sus tanques