Para los toros en España, julio es una época horrible del año. Similar a los crueles encierros de toros en Pamplona, en las que se provoca a los toros para que corran frenéticamente por las calles antes de que los toreros los maten frente a una multitud que grita y se burla; el Bous a La Mar en Dénia celebra el tormento del toro.
Durante el Bous a La Mar, que literalmente significa “Toros en el Mar”, los toros son soltados en las calles de Dénia, donde los humanos los persiguen con palos, los patean, los golpean, los acosan persistentemente y los atraen para que salten o caigan accidentalmente al océano.
Ser provocado para lanzarse desde una cornisa hacia aguas marinas agitadas, probablemente sea extremadamente desorientador y angustioso para los toros, que no son nadadores natos. Los toros incluso se han ahogado como resultado de esta “tradición” barbárica.
Los humanos también resultan heridos durante el Bous a La Mar. A lo largo del evento de este año, que se extendió del 9 al 17 de julio, doce humanos fueron tratados por lesiones.
En sus hábitats naturales, los toros son sociales, cooperativos y protectores con otros miembros de su manada. Sin embargo, las tradiciones violentas y especistas que involucran provocaciones persistentes a los toros, como las corridas de toros, perpetúan una noción falsa sobre estos sensibles animales. En realidad, los toros quieren que los humanos los dejen solos y solo muestran comportamientos defensivos cuando se sienten amenazados.
Atormentar activamente a los toros y luego castigarlos por actuar por instinto es cruel, punto. Actúa a continuación para poner fin a estas viles tradiciones:
¡Actúa por Los Toros!
