Los Reptiles No son ‘Mascotas’: PETA Explica Por qué

¿Comprarías una serpiente, lagartija, o tortuga, si supieras cuán probable es que muera dentro de un año? Se estima que un 75% de los reptiles “mascota”, mueren durante el primer año en casa de un humano. Los reptiles son animales sensibles que requieren de cuidados especializados, sin embargo, son vendidos como si fueran mercancía inanimada a gente que a menudo los compra por impulso, con poco o ningún conocimiento sobre los cuidados apropiados y requerimientos especiales de espacio, calor, humedad, iluminación, presas vivas para la alimentación y demás.

Una investigación encubierta de PETA reveló a dragones barbudos en un enorme distribuidor de PetSmart en Ohio, que sólo recibieron hojas de vegetales marchitas como fuente de “agua”.

Numerosos estudios muestran que, como todos los animales, los reptiles experimentan estrés, ansiedad, angustia, emoción, miedo, frustración, dolor y sufrimiento. Las serpientes, son madres amorosas y protectoras que tienen a sus pequeños al alcance de su vista durante las primeras tres semanas de nacidos. Las lagartijas tienen personalidades individuales, al igual que los gatos y los perros: Algunas son penosas, mientras que otras son valientes. En su hábitat naural, los reptiles disfrutan de nadar, escalar, saltar, excavar y explorar sus territorios, los cuales pueden tener desde una milla cuadrada hasta cientos de millas cuadradas. Los reptiles que tienen los humanos como “mascotas” para entretenerse no pueden disfrutar de estos placeres esenciales y son relegados a vivir sin alegría y sentido.

Animales Exóticos a la Venta: La Verdad Mortal

El sufrimiento de estos animales comienza mucho antes de que terminen en las estanterías de tiendas de mascotas. Investigaciones encubiertas de PETA han revelado maltratos y abandono rampantes en los negocios que transportan y venden reptiles. En U.S. Global Exotics, uno de los vendedores de animales exóticos más grandes del país, que a su vez le distribuye a tiendas de mascotas, incluyendo a Petco y PetSmart, el investigador de PETA encontró a animales confinados en jaulas desoladas y contenedores, que estuvieron así por meses. Se les negaron necesidades básicas como alimento, agua, aire y espacio adecuados, control de temperatura y humedad y cuidados veterinarios. Algunos animales habían muerto de enfermedades, desnutrición y falta de cuidados. Los enfermos fueron metidos en congeladores para sufrir una muerte lenta y horripilante.

El congelador en el que innumerables serpientes y otros animales fueron congelados lenta y cruelmente, hasta morir.

Lagartijas, tortugas, y otros animales fueron enviados de todas partes del mundo a Reptiles by Mack, otro distribuidor de PetSmart, en botellas plásticas de refresco, garrafas de leche y corrales de madera. Decenas de miles de animales en esta instalación, fueron mantenidos en contenedores plásticos sobrepoblados, sin calefacción, lámparas UV, alimento fresco ni agua. Comprar cualquier animal de una tienda de mascotas apoya a estos crueles distribuidores y garantiza que seguirán explotando animales.

¿Es cruel tener serpientes como mascotas?

En sus hábitats naturales, las serpientes se calientan bajo el sol, se refrescan metiéndose bajo la tierra, escalan árboles y nadan con gracia. Son animales sensibles que experimentan angustia y trauma cuando son obligados a vivir en un estrecho tanque de cristal. Ellos necesitan poder estirarse a la máxima longitud de su cuerpo. También necesitan ejercicio y espacio para moverse: Una serpiente pitón, a la que se le había puesto un localizador, recorrió 22 millas en 75 días.

En vez de explorar junglas frondosas y pantanos y experimentar todos los placeres sensoriales a los que están bastante acostumbradas, las serpientes en cautiverio están relegadas a pequeños tanques, donde son incapaces de estirar sus cuerpos, esconderse de amenazas, regular su temperatura, buscar una dieta natural y balanceada, o moverse más de unas cuantas pulgadas en cualquier dirección.

Empresas como Zoo Zed, Zilla y Exo Terra, venden recintos y equipos para serpientes en Petco, PetSmart y Walmart, que anuncian como “apropiados” o “ideales”, pero no lo son. Por ejemplo, algunos hábitats, que no son más que peceras exaltadas, son tan pequeños, que las serpientes ni siquiera pueden estirarse por completo, aunque los expertos en reptiles recalcan que la posibilidad de estirar su cuerpo completamente es esencial para su salud y bienestar y que aquellas que no pueden hacerlo, son susceptibles a estrés, lesiones y enfermedades. Algunas empresas como Zoo Med, incluso recomiendan con indolencia hábitats que miden tan sólo “la mitad de la longitud de una serpiente”.

Muchas personas compran serpientes sólo para darse cuenta de que no pueden satisfacer las costosas y complejas necesidades de estos animales. Como resultado, muchas serpientes son botadas cada año, o escapan como consecuencia de cuidados inapropiados. Otras son maltratadas y asesinadas: En Florida, una boa constrictora de 6 pies murió tras ser hallada en un basurero con el cráneo triturado. Las autoridades de Florida también organizan competencias anuales de asesinato de pitones e invitan a cazadores inexpertos a matar serpientes con pistolas de pernos, armas de fuego o decapitación, lo cual puede causar una muerte prolongada y agonizante.

¿Qué tiene de malo tener una lagartija como “mascota”?

Las lagartijas tienen personalidades complejas y necesidades físicas y sociales específicas. Sin el cuidado apropiado, muchas sufren de condiciones de salud serias y dolorosas, como la enfermedad ósea metabólica por déficit de calcio, la pudrición bucal, enfermedades respiratorias, abscesos y úlceras. Estos sensibles animales, a menudo muestran su angustia y deseo por ser libres, frotando sus narices contra el cristal de los recintos.

Mientras se encontraba en un criadero de reptiles que cría y vende animales a PetSmart, un investigador de PETA documentó las muertes de más de 675 animales, incluyendo a estas lagartijas.

La gente a menudo compra iguanas cuando son pequeñas, sin darse cuenta de que pueden crecer hasta medir 6 pies de longitud y vivir hasta por 20 años, y que brindarles los cuidados adecuados puede costar cientos de dólares al año. Al igual que las serpientes pitón, mucha gente abandona a estos animales cuando se les pasa la novedad y se instaura la realidad que presentan sus cuidados. La población de iguanas en el sur de Florida se ha incrementado desde los 60s, cuando fueron introducidas como mascotas exóticas. Las autoridades han respondido tratando de matarlas: La ciudad de Miami Beach, por ejemplo, contrató un servicio para matar iguanas que sólo intentaban sobrevivir después de ser cruelmente abandonadas por sus dueños.

Es un infierno en vida para las tortugas “mascota”

En EE.UU., muchas de las especies nativas de tortugas vendidas en tiendas de mascotas han sido sacadas de sus hogares y familias en la naturaleza. Cuando las tortugas crecen más de lo esperado, a menudo son botadas ilegalmente en áreas donde desplazan a especies nativas e introducen enfermedades. Las tortugas de orejas rojas son la especie de tortuga más victimizada por la industria de las “mascotas”. En su hábitat natural, estas tortugas pueden explorar hasta 5.5 millas lejos del agua, en busca de un hábitat adecuado, pareja o nido donde poner sus huevos. Pero mantenidas como mascotas, a menudo son relegadas a contenedores o tanques desolados y estrechos que son completamente inadecuados para satisfacer sus necesidades.

A muchas especies (incluyendo estas tortugas mantenidas en albercas de niños sobre pisos de concreto) se les negó iluminación adecuada, una fuente de calor y otras necesidades en Reptiles by Mack, un distribuidor de PetSmart.

No pueden disfrutar ningún placer natural o seguir sus instintos y, en cautiverio, normalmente mueren jóvenes, alrededor de un año, en contraste con los 70 años que pueden llegar a vivir en su hábitat natural.

¿Los cocodrilos “mascota” son legales? Te decimos por qué no deberían serlo

Los cocodrilos y lagartos son animales complejos y sensibles que no deberían ser mantenidos como “mascotas”. En su hábitat natural, las madres lagarto protegen sus huevos de depredadores, permaneciendo cerca de ellos hasta que eclosionan. Si algún huevo tarda demasiado en romperse, ella lo rodará suavemente en su boca para ayudarlo a abrirse. La madre carga a sus recién nacidos en la boca y les enseña a nadar.

El cautiverio simplemente no puede satisfacer las necesidades de estos animales y todo aquel que compre un lagarto o cocodrilo bebé puede estar seguro de que el enorme tamaño que llegan a alcanzar los abrumará rápidamente. Y aunque pueden tener una apariencia “fuerte”, estos animales son altamente susceptibles al estrés y pueden desarrollar anomalías y deformidades dolorosas por vivir en espacios pequeños en los que no pueden caminar ni nadar a voluntad.

Enfermedades comunes en los reptiles pueden ser fatales en humanos

Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), alertan en contra de tener reptiles como “mascotas”, puesto que presentan un alto riesgo de transmitir la salmonela potencialmente fatal. Tortugas, lagartijas y anfibios pueden portar la bacteria salmonela en la piel y el caparazón y ésta puede ser hallada en los recintos de los animales. La bacteria puede ser transmitida con tan sólo tocarlos, al limpiar sus tanques en un lavabo, permitiéndoles caminar por el suelo y otras superficies o permitiendo que los niños los toquen y después se lleven las manos a la boca.

Las cifras de los CDC indican que en tan sólo un año, más de 200 personas fueron infectadas con salmonela y el 41% de ellas tenía menos de 5 años de edad. La infección por salmonela causa diarrea, fiebre, dolor estomacal, náusea, vómito y dolor de cabeza; y puede ser mortal en niños, ancianos y personas con otras condiciones médicas.

Las investigaciones de PETA, dentro de instalaciones de crianza de lagartos y cocodrilos, han mostrado que estos animales son mantenidos en condiciones estresantes y antihigiénicas, y la pandemia de coronavirus nos ha enseñado que los animales estresados, mantenidos en cautiverio, tienen más probabilidades de portar enfermedades.

Ya sea que los reptiles sean criados como mascotas, por su carne o por sus pieles, queda claro que las condiciones de suciedad y hacinamiento en las que se encuentran confinados, son caldos de cultivo de enfermedades.

¿Piensas comprar un reptil como “mascota”? No lo hagas

Incluir a un reptil en tu familia es un compromiso enorme de tiempo, espacio y recursos. Estos animales tienen necesidades extremadamente complejas que sólo pueden ser satisfechas al permitirles quedarse en su hábitat natural. Por favor, nunca compres reptiles de criadores. Hacerlo apoya industrias plagadas de crueldad, en las que seres sintientes son arrancados de sus ecosistemas únicos o criados en depósitos miserables y tratados como productos desechables. En lugar de relegar a uno de estos sensibles animales a una vida de privación y sufrimiento, considera adoptar a otro tipo de animal, como un perro, gato, o conejo, que puede prosperar bajo los cuidados apropiados en el ambiente de un hogar humano.

Puedes hacer más por los reptiles

Ayuda a los reptiles “mascota”, victimizados por el comercio de animales exóticos:

INSTA A PETSMART A QUE DEJE DE VENDER REPTILES Y OTROS ANIMALES VIVOS